INCORPORAR LA INFORMACIÓN SELECCIONADA A SU PROPIA BASE DE CONOCIMIENTOS
“LA VIDA ES UN TANGO Y SI TE RESBALAS SIGUE BAILANDO”
Anónimo
El propósito al escribir sobre el tango es dar a conocer como toda la influencia que a partir de la historia, lenguaje, representantes, tipos, baile, entre otras, ha formado la identidad de un arrabal argentino, pues connota todos los sentimientos, ya sean de odio o amor, que recuerda aquella esencia melancólica de la vida, que en su día a día, aún no pasa, pero que hace parte de la existencia.
Dentro de todo el proceso se pretende contestar la siguiente pregunta: ¿Qué evento o situación motivo la existencia del tango? , con el fin de analizar la influencia de los acontecimientos en el desarrollo u evolución de una cultura.
Para dar respuesta a este proceso de indagación es necesario recoger información acerca de la historia del tango argentino y su crecimiento en los arrabales, a demás de la vida de diferentes compositores que permita conocer que los impulso a sumergirse en un género antiguamente, aunque diría también que aún, exótico.
La idea al hablar de tango, no es convencer al lector, si no invitarlo a conocer un género musical abierto al mundo, pues diariamente esta innovado con un sinnúmero de tendencias, que poco son conocidas pero que realmente se caracterizan por una elaboración simple que conjuntamente, al murmullo de un violín y con forma de bandoneón dan un eterno compás al tango argentino.
Dentro de todo el proceso se pretende contestar la siguiente pregunta: ¿Qué evento o situación motivo la existencia del tango? , con el fin de analizar la influencia de los acontecimientos en el desarrollo u evolución de una cultura.
Para dar respuesta a este proceso de indagación es necesario recoger información acerca de la historia del tango argentino y su crecimiento en los arrabales, a demás de la vida de diferentes compositores que permita conocer que los impulso a sumergirse en un género antiguamente, aunque diría también que aún, exótico.
La idea al hablar de tango, no es convencer al lector, si no invitarlo a conocer un género musical abierto al mundo, pues diariamente esta innovado con un sinnúmero de tendencias, que poco son conocidas pero que realmente se caracterizan por una elaboración simple que conjuntamente, al murmullo de un violín y con forma de bandoneón dan un eterno compás al tango argentino.
IDEAS PRINCIPALES:
· Historia del tango argentino, analizando la vida del arrabal y los inmigrantes al barrio La Boca.
· Instrumentos representativos del tango.
· Compositores y principales representantes del tango argentino, su historia y obras más características.
· Desarrollo del tango en la actualidad, teniendo en cuenta bifurcaciones o análogos como el electrotango y milonga respectivamente.
· El baile y lenguaje como características típicas del tango argentino.
· Influencia en Medellín y sitos de tango comprometidos con la conservación del mismo.
· Historia del tango argentino, analizando la vida del arrabal y los inmigrantes al barrio La Boca.
· Instrumentos representativos del tango.
· Compositores y principales representantes del tango argentino, su historia y obras más características.
· Desarrollo del tango en la actualidad, teniendo en cuenta bifurcaciones o análogos como el electrotango y milonga respectivamente.
· El baile y lenguaje como características típicas del tango argentino.
· Influencia en Medellín y sitos de tango comprometidos con la conservación del mismo.
Las ideas anteriormente mencionadas poseen un patrón, el cual es la historia del tango, como epicentro, pues es a partir de ésta que se desarrolla y alcanza el reconocimiento, ya sea por sus bailes, letras o el sonido absorbente del bandoneón al traducir las vivencias del autor en formas eufemísticas del desamor, el tiempo y el dolor de una despedida, o recuerdos gratos, pero pasajeros.
La información dada en mi escrito se basa en datos verídicos, sin embargo mantener una aptitud crítica frente a la realización del mismo me permitirá exigir más de las búsquedas y redefinir algunos conceptos que se daban por sentado. Las ideas llevaran impregnadas concepciones propias, pero éstas no serán un obstáculo para la veracidad del mismo.
Para el desarrollo del tema se incluirá opiniones diversas, de la talla de Jorge Luís Borges, bailarinas de tango, amantes de este género y la barra de comentarios estará abierta para cualquier visitante que quiera agregar algo o sugerir.
El lector es el crítico de mi trabajo, por tanto es quien lo califica. Me permite mejorar aspectos que me pasaron por alto.
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Poema
El tango
¿Dónde estarán?, pregunta la elegía
de quienes ya no son, como si hubiera
una región en que el Ayer pudiera
ser el Hoy, el Aún y el Todavía.
¿Dónde estará (repito) el malevaje
que fundó, en polvorientos callejones
de tierra o en perdidas poblaciones,
la secta del cuchillo y del coraje?
¿Dónde estarán aquellos que pasaron,
dejando a la epopeya un episodio,
una fábula al tiempo, y que sin odio,
lucro o pasión de amor se acuchillaron?
Los busco en su leyenda, en la postrera
brasa que, a modo de una vaga rosa,
guarda algo de esa chusma valerosa
de los Corrales y de Balvanera. .
¿Qué oscuros callejones o qué yermo
del otro mundo habitará la dura
sombra de aquel que era una sombra oscura,
Muraña, ese cuchillo de Palermo?
¿Y ese Iberra fatal (de quien los santos
se apiaden) que en un puente de la vía,
mató a su hermano el Ñato, que debía
más muertes que él, y así igualó los tantos?
Una mitología de puñales
lentamente se anula en el olvido;
una canción de gesta se ha perdido
en sórdidas noticias policiales.
Hay otra brasa, otra candente rosa
de la ceniza que los guarda enteros;
ahí están los soberbios cuchilleros
y el peso de la daga silenciosa.
Aunque la daga hostil o esa otra daga,
el tiempo, los perdieron en el fango,
hoy, más allá del tiempo y de la aciaga
muerte, esos muertos viven en el tango.
En la música están, en el cordaje
de la terca guitarra trabajosa,
que trama en la milonga venturosa
la fiesta y la inocencia del coraje.
Gira en el hueco la amarilla rueda
de caballos y leones, y oigo el eco
de esos tangos de Arolas y de Greco
que yo he visto bailar en la vereda,
en un instante que hoy emerge aislado,
sin antes ni después, contra el olvido,
y que tiene el sabor de lo perdido,
de lo perdido y lo recuperado.
En los acordes hay antiguas cosas:
el otro patio y la entrevista parra.
(Detrás de las paredes recelosas
el Sur guarda un puñal y una guitarra.)
Esa ráfaga, el tango, esa diablura,
los atareados años desafía;
hecho de polvo y tiempo, el hombre dura
menos que la liviana melodía,
que sólo es tiempo. El tango crea un turbio
pasado irreal que de algún modo es cierto,
un recuerdo imposible de haber muerto
peleando, en una esquina del suburbio.
Jorge Luis Borges
¿Dónde estarán?, pregunta la elegía
de quienes ya no son, como si hubiera
una región en que el Ayer pudiera
ser el Hoy, el Aún y el Todavía.
¿Dónde estará (repito) el malevaje
que fundó, en polvorientos callejones
de tierra o en perdidas poblaciones,
la secta del cuchillo y del coraje?
¿Dónde estarán aquellos que pasaron,
dejando a la epopeya un episodio,
una fábula al tiempo, y que sin odio,
lucro o pasión de amor se acuchillaron?
Los busco en su leyenda, en la postrera
brasa que, a modo de una vaga rosa,
guarda algo de esa chusma valerosa
de los Corrales y de Balvanera. .
¿Qué oscuros callejones o qué yermo
del otro mundo habitará la dura
sombra de aquel que era una sombra oscura,
Muraña, ese cuchillo de Palermo?
¿Y ese Iberra fatal (de quien los santos
se apiaden) que en un puente de la vía,
mató a su hermano el Ñato, que debía
más muertes que él, y así igualó los tantos?
Una mitología de puñales
lentamente se anula en el olvido;
una canción de gesta se ha perdido
en sórdidas noticias policiales.
Hay otra brasa, otra candente rosa
de la ceniza que los guarda enteros;
ahí están los soberbios cuchilleros
y el peso de la daga silenciosa.
Aunque la daga hostil o esa otra daga,
el tiempo, los perdieron en el fango,
hoy, más allá del tiempo y de la aciaga
muerte, esos muertos viven en el tango.
En la música están, en el cordaje
de la terca guitarra trabajosa,
que trama en la milonga venturosa
la fiesta y la inocencia del coraje.
Gira en el hueco la amarilla rueda
de caballos y leones, y oigo el eco
de esos tangos de Arolas y de Greco
que yo he visto bailar en la vereda,
en un instante que hoy emerge aislado,
sin antes ni después, contra el olvido,
y que tiene el sabor de lo perdido,
de lo perdido y lo recuperado.
En los acordes hay antiguas cosas:
el otro patio y la entrevista parra.
(Detrás de las paredes recelosas
el Sur guarda un puñal y una guitarra.)
Esa ráfaga, el tango, esa diablura,
los atareados años desafía;
hecho de polvo y tiempo, el hombre dura
menos que la liviana melodía,
que sólo es tiempo. El tango crea un turbio
pasado irreal que de algún modo es cierto,
un recuerdo imposible de haber muerto
peleando, en una esquina del suburbio.
Jorge Luis Borges
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